José Luis Escrivá, ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ha anunciado que su departamento está estudiando la posibilidad de modificar o eliminar las llamadas golden visa, que otorgan permisos de residencia a los extranjeros que invierten al menos 500.000 euros en una vivienda en España. Esta medida se enmarca dentro de las negociaciones con Más País, el partido liderado por Íñigo Errejón, que considera que estas visas favorecen la especulación inmobiliaria y la entrada de dinero ilícito en el país.
Las golden visa se introdujeron en 2013, durante el Gobierno de Mariano Rajoy, con el objetivo de atraer inversión extranjera y reactivar el sector inmobiliario tras el estallido de la burbuja. Desde entonces, se han concedido más de 35.000 permisos de este tipo, la mayoría a ciudadanos chinos y rusos. Según los datos del Ministerio de Asuntos Exteriores, en 2020 se otorgaron 6.513 visas por compra de vivienda, un 2% más que en 2019.
Sin embargo, esta fórmula ha sido criticada por diversos sectores sociales y políticos, que la ven como una forma de vender la ciudadanía española y el acceso al espacio Schengen a cambio de dinero. Además, se ha denunciado que estas visas pueden facilitar el blanqueo de capitales y la evasión fiscal, así como contribuir al encarecimiento de los precios de la vivienda en algunas zonas.
Por eso, el Ministerio de Escrivá está analizando dos opciones: endurecer los requisitos para obtener las golden visa, elevando el mínimo de inversión a un millón de euros o más; o suprimir directamente esta modalidad de permiso de residencia por compra de vivienda. En cualquier caso, se mantendrían otras vías para obtener la residencia por inversión, como la compra de bonos del Estado por valor de dos millones de euros o la creación de un proyecto empresarial en España.
La propuesta cuenta con el apoyo de Más País, que ya presentó una iniciativa parlamentaria en este sentido en febrero, aunque fue rechazada por el Congreso. El líder de esta formación, Íñigo Errejón, ha manifestado que las golden visa son “moralmente nocivas” y colocan a España como “una colonia que atrae el dinero negro”. Por ello, ha pedido al Gobierno que elimine esta “vergüenza” y que apueste por una política migratoria “más justa y solidaria”.
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